Reciprocidad de los lectores

En esta semana, las reacciones no han sido tanto por los artículos actuales, 25-35 (que, por cierto tiene el título equivocado aunque no cambia el significado) y Tiffany's en Ruzafa, sino por el retraso en la actualización del blog y por artículos anteriores. Como siempre, el buen juicio de Ernesto arroja luz sobre puntos discutibles de los textos. Bienvenida luminaria aquella del lector que escribe al columnista con tanto esfuerzo como dedica él a sus lectores. Reproduzco parte de su email porque merece la pena:

"No me gustó la columna del 'comando antifallero'. Vale, de acuerdo, era simpático y tenía bastante humor, no hay que tomárselo muy en serio pero eso de incitar un comando... pues qué quieres que te diga, no están las cosas como para echar más leña al fuego. Creo que lo anterior puede ir en consonancia con el que has dedicado al Papa y el Encuentro Mundial de las Familias. Lo digo porque, en mi humilde opinión, los más progres en particular y los valencianos en general somos como el perro del hortelano que ni come ni deja comer: si en Valencia no hay eventos internacionales nos quejamos de que somos una ciudad provinciana y si se organizan grandes reuniones y convocatorias (léase Copa América o el EMF) pues también criticamos el jaleo, los gastos, los preparativos... todo.De ahí que animar a un comando antifallero me parece que es dar argumentos a unas opciones que si bien son muy respetables no hacen más que fomentar debates huecos, críticas y demagogia que no conduce a nada...".